lunes, 10 de junio de 2013

¿como está hoy la postura de mi cuerpo?

El registro cotidiano de nuestras posturas corporales queda por fuera de nuestra percepción.  Desde las tareas hogareñas-domesticas, los espacios de estudio, o en lo laboral, todo está direccionado al desarrollo de las tareas en si, sin considerar el como va a ejecutar la acción nuestro cuerpo. Y lo que puede ser más agravante, es conservar el hábito de realizarlo siempre igual, vaya uno a saber por que, considerando que es el único modo de hacerlo.
Un lugar para comenzar el registro es observar nuestros apoyos, nuestros pies y su postura, el calzado que utilizamos...
¿relacionaste alguna vez las variantes que puede realizar el calzado en todo tu eje corporal, en tu columna?
La ilustración detalla los porcentajes en la distribución desproporcionada del peso corporal, con el consiguiente deterioro o lesión que esto puede provocar.



Esta es una de las tantas causas de los trastornos por los que transita nuestro cuerpo.
¿te parece que podría ser un tema para considerar?

Estracto del Manual  de Trastornos MusculoEsqueléticos

Los trastornos músculo esqueléticos (TME) constituyen el problema de salud
de origen laboral más frecuente entre los trabajadores y trabajadoras de los países industrializados.
En la actualidad una cuarta parte de los trabajadores, sino hablamos de muchos más, se queja de dolores de musculares, y casi una misma proporción declaran padecer permanentes dolores de espalda, abarcando con ello una serie de patologías, todas directamente asociadas a incomodas posturas físicas en las áreas de trabajo, o excesiva carga física que excede las capacidades del trabajador provocando fatiga y disconfort.
Sin embargo, muchas de las disfunciones relacionadas con los TME y cuyo origen es claramente laboral no siempre son reconocidas, quedando encubiertas como enfermedades comunes, lo que conlleva que este tipo de afecciones se deriven hacia el Sistema Público de Salud para su posterior tratamiento como problemas de salud común.

¿QUÉ SON LOS TRASTORNOS MUSCULOESQUELÉTICOS (TME)?
Son un conjunto de lesiones inflamatorias o degenerativas de músculos, tendones, articulaciones, ligamentos, nervios, etc. Sus localizaciones más frecuentes se bservan en cuello, espalda, hombros, codos, muñecas, manos y pies.
Los diagnósticos más comunes son las tendinitis, tenosinovitis, síndrome del túnel carpiano, mialgias, cervicalgias, lumbalgias, juanetes, edemas, etc.
El síntoma predominante es el dolor asociado a inflamación, pérdida de fuerza y disminución o incapacidad funcional de la zona anatómica afectada.

SINTOMATOLOGÍA
Los síntomas relacionados con la aparición de alteraciones músculo-esqueléticas incluyen dolor muscular y/o articular, sensación de hormigueo, pérdida de fuerza y disminución de sensibilidad.
En la aparición de los trastornos originados por sobreesfuerzos, posturas forzadas y movimientos repetitivos pueden distinguirse tres etapas:

1. Aparición de dolor y cansancio durante las horas de trabajo, mejorando fuera de este, durante la noche y los fines de semana.
2. Comienzo de los síntomas al inicio de la jornada laboral, sin desaparecer por la
noche, alterando el sueño y disminuyendo la capacidad de trabajo.
3. Persistencia de los síntomas durante el descanso, dificultando la ejecución de
tareas, incluso las más triviales.

Dado que después de hacer un esfuerzo físico es normal que se experimente cierta fatiga, los síntomas aparecen como molestias propias de la vida normal. Aún así,
la intensidad y la duración del trabajo pueden guardar relación con posibles alteraciones, aumentando el riesgo de un modo progresivo.
Una adecuada evolución de los trastornos músculo-esqueléticos dependerá en gran parte de un diagnóstico precoz y de un tratamiento correcto, por lo que es importante consultar a un profesional en cuanto sean detectados los primeros síntomas.

Según la Agencia Europea para la Seguridad y la Salud en el Trabajo (2007), los factores que contribuyen a la aparición de TME son los siguientes:


Factores físicos
• Manipulación manual de cargas/aplicación de fuerzas
• Posturas Mantenidas: forzadas, estáticas
• movimientos repetidos
• vibraciones
• entornos de trabajo fríos

Factores psicosociales
• demandas altas, bajo control
• falta de autonomía
• falta de apoyo social
• repetitividad y monotonía
• insatisfacción laboral

Individuales
• historia médica
• capacidad física
• edad
• obesidad
• tabaquismo


Bibliografía.
Enfermedades profesionales osteomusculares y factores de riesgo ergonómicos.
Instituto Vasco de Seguridad y Salud Laborales OSALAN
Trastornos músculo-esqueléticos de origen laboral. Instituto Navarro de Salud Laboral
Departamento de Salud OSALAN

MANUAL DE MÁQUINAS Y EQUIPOS DE TRABAJO
Edita:  Secretaria de Salud Laboral,
CC.OO. Comisiones Obreras de Castilla y León,
Junta de Castilla y León,
Acción en Salud Laboral.

Ernesto Reich, Reflexólogo Holístico

jueves, 6 de junio de 2013

¿en que consiste la cura? reflexiones...


Reflexiones reflexológicas en método de interrogación, sin pretensión de respuestas…
¿en que consiste la cura?
Sobre un trabajo práctico para el taller de: Introducción a la PsicologíaEscuela Argentina de Reflexología –MIRHA.

¿en que consiste la cura?  ¿de que hablamos cuando hablamos de cura?
Si hablamos de cura ¿hay una presunción de que hay algo a curar?
Hablamos entonces, de un malestar, una disfunción o “enfermedad”, ¿un conflicto en cualquier área de la persona, sea físico, psíquico, espiritual, energético o su entorno?

La cura, ¿sería algo puntual?  Como ser, si ingerimos tal o cual “pastilla”, la solución se manifiesta… ¿o es un devenir de situaciones consecuentes unas con otras?  ¿Tal vez un proceso que se podría llamar tratamiento…?
¿y como proceso, es pasivo y unidireccional? Por ejemplo, el caso del paciente que trae su cuerpo y su malestar para recibir, a cambio de abonar los honorarios, el  masaje reflexológico, y con ello: la cura!!!  ¿O es un proceso activo?  El masaje, los estímulos producidos por el masaje, las manifestaciones del cuerpo en reacción a los estímulos, los cambios en los estados de ánimo como consecuencia de una sensación corporal diferente…  en fin, una cadena de situaciones y sus posibles consecuencias posteriores,
Entonces ¿Esta reacción podría desencadenar el nuevo accionar de la persona consultante-paciente?

De la definición de curar: “recobrar la salud”,  como reflexólogos ¿recobramos algo? ¿Colaboramos a que el paciente recobre algo? O solo hacemos el masaje y cobramos…porque, el trabajo, a partir de nuestro trabajo, es del otro!!!
Recuperar algo, en este caso la “salud”, la armonía en nuestro cuerpo, tal vez necesite de una compañía…además del trabajo reflexológico, la presencia de otro que escucha, que acompaña, ¿podría esta instancia ayudar al reencuentro de esa armonía?

De la ansiedad de encontrar una rápida solución puede surgir la pretensión  y/o exigencia. Tanto en nuestro trabajo como reflexólogos, así como en quien consulta, la expectativa puede estar presente. ¿Esta ansiedad nos invade o genera conflicto en el desempeño? ¿Nos hacemos cargo de las pretensiones y/o exigencias del consultante?

Comúnmente, el que consulta lo hace a partir de una falta, por falta de salud, de bienestar, por falta de conocimiento sobre algo de Sí.  A partir de su “carencia”  deposita un saber afuera, en otro, quien supuestamente tiene la verdad. ¿la verdad de la que él carece? ¿o la que aún no ha podido escuchar dentro de él?
Hay un concepto de cura terapéutica (sobre salud mental) que dice: “dejar de ser lo que no somos, para ser quienes somos”…
Aquí podrían aparecer los conceptos de Autonomía, Autodeterminación, Autoconocimiento, de reconocer el tipo de relaciones con las que interactuamos, (desarrolladoras o dañinas) y sus posibles opciones de transformación.  Por lo tanto, quien consulta  ¿está dispuesto a recorrer un sendero que lo lleve a saber quien es?

En el lenguaje gramatical, el sujeto es (existe) en tanto hay otro que lo nombra (lo dice), ¿Cómo funcionaría esto con la cura? ¿hay alguien que dice cual es el camino a seguir para alcanzar la cura?
Si entendemos a la persona (paciente) como una unidad bío-psíco-social, tal vez la cura sea algo más que la liberación del conflicto (dolor, enfermedad, malestar).  La cura, podría ser la enseñanza que estos conflictos traen para aprender a convivir con lo incurable que nos constituye.  Enseñanza que nos llevaría al reconociendo y toma de consciencia de nuestras propias sombras, nuestras zonas oscuras inconscientes….esas fieles y presentes compañeras de viaje, que junto a todos nuestros otros aspectos y características nos conforman.

Aceptando las palabras del Nano Serrat cuando dice: “uno solo es lo que es, y anda siempre con lo puesto”, ¿Qué sentido tienen las pretensiones de ser lo que no somos?
Las pretensiones, las exigencias, modestamente sin modestia, intuyo que son el camino opuesto al conocimiento, podríamos imaginarlas como una atractiva autopista que nos conduce hacia un ilusorio horizonte, lleno de frustración.

Por lo tanto, ¿se podría entonces, desde una intención clara y consciente, aceptar transitar el camino hacia la cura?, un camino hecho a la medida de la necesidad de cada uno…

Ernesto Reich.
Reflexólogo Holístico.

Dic/2012